miércoles, 19 de junio de 2013

Arzú desde sus raices del Vulgo

LAS PUBLICACIONES DE ARZÚ SON UNA 

INMORALIDAD

Hace unos pocos días fuimos testigos de un video del ex hermano Arzú, quien hace fuertes declaraciones en contra del Pastor Antonio Corea de su mismo País Honduras.

Como muchos saben o ignoran y para detallar este informe; Ramón Arzú, que en un principio se hizo llamar Juan Arzú se supo que su nombre real es Ramón García Arzú. Hay detalles que dicen que es por su pasado, puede que indaguemos al respecto y sepamos qué es lo que oculta este hombre que no desea llamarse originalmente como Ramón García Arzú.

Continuando con lo expresado por este hombre, que ha denostado muy vulgarmente y de forma verbalmente agresiva a la Esposa del Pastor Antonio Corea, a quien trató de una forma muy anticristiana que nadie, ni a un inconverso se le trata así tan discriminada y grosera y cobardemente a una mujer sea Cristiana o no.

Arzú estuvo en Chile el año pasado en Enero y ya desde la salida de Honduras las cosas tomaron un matiz de un prólogo del que se avecinaba y que nadie hacía presagiar la hoguera que encendería desde su partida hasta la llegada, estadía y partida desde Chile a Honduras.

Cuando se hacían los preparativos para la venida a Chile ya Arzú hacía de Amo y el Pastor Corea de mozo, o simple siervo (siervo=esclavo); mutuo acuerdo o abuso de autoridad?.  Lo que sí se notó mucho es que Arzú cayó en muchas contradicciones en Chile, a tal punto que un día fue invitado a predicar al Ministerio Evangelístico Cruzada de Poder con un tema para los Líderes y a la hora de hacer la exposición expuso un Mensaje que a pocas penas entendió él mismo.

Ese mismo mensaje le trajo problemas por un tema de inclinación hacia la doctrina Calvinista por lo que el Arzú fue citado a aclarar dicho mensaje ante el Pastor Marcos Morales Chávez. Muy molesto, con ganas de no ir y rezongando, cedió finalmente a regañadientes y enfrentó el tema pero hasta último minuto quería salir volando antes de la entrevista en cuestión por el tema.

jueves, 13 de junio de 2013

La Fuerza de la costumbre...

Habituados a mentir


La verdad nos mantiene en paz, con la conciencia limpia, y sin estrés.
La mentira implica un fraude, un engaño, una injusticia. El que miente a su prójimo esta traicionando su confianza.

La mentira siempre es mentira. Algunos piensan erróneamente que las mentiras tienen ciertos grados de permisividad, y las llaman “mentiras piadosas” o “mentiras blancas”.

Supongamos que Jesús y Pedro estaban en un charla y de repente suena el teléfono y el Señor atiende y dicen – Hola Jesús, Soy Juan, necesito que me pases con Pedro - Pedro lo mira y le hace señas que no le pase, Jesús piensa y le dice a Juan – Salió a pescar -. ¿Te imaginas al Señor mintiendo así? ¡De Ninguna manera! Sin embargo para muchos de nosotros esto puede tratarse de una acto inocente.

Cuando alguien comienza a habituarse a la mentira tiene que engañar a su conciencia, apagando su voz. Pero al ignorar repetidas veces el llamado de la conciencia ésta comienza a entumecerse, como resultado, las siguientes mentiras que digamos no se podrán distinguir entre inocentes o graves, porque la conciencia va perdiendo toda su sensibilidad. La persona habituada a mentir se acostumbra a siempre agregar alguna mentira en sus conversaciones. Es muy difícil volver al hábito de la verdad luego de anular la voz de la conciencia.

Las personas que mienten cotidianamente están expuestas a la maldición, generalmente estas personas se preguntan constantemente por qué no están recibiendo ciertas  bendiciones de Dios, pero la práctica del pecado es como levantar una  barrera que impide el fluir del Espíritu Santo. Nadie que practique el pecado podrá vivir bajo el favor y agrado de Dios. Si quieres recibir todas las bendiciones que Dios tiene para ti comienza a limpiar tu lengua. Proverbios 6:17 nos menciona a la mentira como uno de los actos más aborrecibles para Dios. Decir la verdad, aunque a veces cueste mucho, es la mejor medicina. Mentir es como querer construir una casa sobre arena movediza, temporalmente parece que todo esta bien, pero de golpe se derrumba y hay que comenzar de nuevo, en cambio decir la verdad es como construir una casa sobre un cimiento sólido, una vez que se termina, queda para siempre. Por eso la biblia nos enseña: “Los labios veraces permanecerán para siempre, Pero la lengua mentirosa, sólo por un momento”. Prov. 12:19


El hábito de decir la verdad en cualquier situación es el camino de Dios. La verdad nos mantiene en paz, con la conciencia limpia, y sin estrés. Según la medicina, el estrés aumenta el riesgo de infarto y una de las causas más comunes de estrés es tener que estar mintiendo todo el tiempo. Los motores de la mentira pueden ser la arrogancia, la envidia y la baja estima. Otras veces la mentira proviene de no querer herir al otro, pero no creamos que hay que mentir para no herir, es necesario decir la verdad con amor. Alguien que recibe mentiras para no ser lastimado, terminará siendo aún  más lastimado cuando se entere de la verdad. La honestidad nos deja a todos un sabor agradable, una sensación de claridad. Recuerda siempre: ”La mentira nos ata y enferma. La verdad es salud y libertad”

El Chile que Despertó

  EL CHILE QUE DESPERTÓ  Por Cristián Merino Vega Recuerdo que hace unos años atrás cuando los inmigrantes llegaban en masa a Chile y co...